Cuenta Pública Plan Chatarra 2011

Fiscalía de Chile, SII y Aduanas logran disminuir robo de cable de cobre en un 81%

Gracias a la estrecha colaboración entre las instituciones se concretaron investigaciones para determinar la cadena de comercialización

Jueves 17 de mayo de 2012

FOTO_03
W:1024
H:682
75 kbLa Fiscalía de Chile, el Servicio Nacional de Aduanas y el Servicio de Impuestos Internos, a comienzos del año 2011, acordaron reorganizar el trabajo para combatir la comercialización de cables sustraídos, direccionándolo hacia una fiscalización y persecución penal inteligentes . Este trabajo interinstitucional fue denominado Plan Chatarra, que durante el año 2011 logró una disminución de un 81% en la cantidad de kilogramos de cobre robado, pasando de 536.056 en el año 2010, a 101.467 kg. durante el 2011. Ello provocó que se redujera también el número de denuncias ingresadas al sistema, que en el año 2010 ascendían 2.255, y que en 2011 llegó a sólo 928 casos.

Para llegar a estas positivos resultados, las tres instituciones diseñaron un minucioso trabajo para determinar quien es quien en la comercialización de cables sustraídos y, una vez confeccionado este mapa , se determinó cómo atacarlo.

Como resultado de las investigaciones dirigidas a determinar la cadena de comercialización de cables sustraídos, se formalizaron a personas relacionadas con más de 5 empresas en distintas regiones del país (I, RM, VI, VII) imputándoles cargos como autores de delitos tributarios, aduaneros, asociación ilícita y receptación. Y se emplearon modelos de investigación, que incluyeron incautaciones de cerca de 50 mil kg. de especies sustraídas, para lo cual se efectuaron interceptaciones telefónicas, peritajes contables, allanamientos simultáneos en más de una región para obtener documentación y detener personas. 

El plan interinstitucional

FOTO_02
W:1024
H:682
96 kbLa reorganización de la fiscalización y de la persecución penal de este ilícito, como producto del diseño del Plan Chatarra 2011, significó en términos prácticos, que las tres instituciones comenzaran un trabajo especial para detectar los patrones que caracterizan este fenómeno criminal y así intervenirlo a modo de reducir la demanda por especies sustraídas. La idea fue proyectar, con esos antecedentes, investigaciones de largo aliento para imputar la comisión de los delitos asociados a la comercialización de este tipo de especies. Esta tarea se hizo aún más necesaria después de los lamentables acontecimientos que terminaron con la vida de dos integrantes de la PDI en marzo de 2011 y que fueron protagonizados por Italo Nolli.

Las Fiscalías Regionales designaron fiscales adjuntos como coordinadores de cada fiscalía regional, con el objetivo de que ellos fueran el brazo ejecutivo de los distintos procedimientos que tanto el Servicio Nacional de Aduanas y el Servicio de Impuestos Internos desarrollaron en distintas regiones del país. Además, la Unidad Especializada de Lavado de Dinero, Delitos Económicos y Crimen Organizado (ULDDECO) de la Fiscalía Nacional tuvo a su cargo la coordinación de las tres instituciones y de los fiscales especiales, junto con colaborar como referente técnico en las investigaciones criminales que se iniciaron en distintas partes del país.

Por su parte, el Servicio de Impuestos Internos (SII) desarrolla acciones de inteligencia tributaria que permiten establecer antecedentes acerca de hechos que constituyen delitos de su competencia, habitualmente bajo la modalidad del uso de facturas ideológicamente falsas, que simulan la existencia de operaciones de compra venta, para con ellas respaldar maliciosamente la adquisición a terceros de cable robado. 

En tanto, el Servicio Nacional de Aduanas analiza a través de diferentes métodos de control, las exportaciones que pueden ser de riesgo en el perfil de fiscalización de cable y sus derivados.