Saludo del Director Nacional a las funcionarias en el Día de la Mujer

FOTO_01
W:200
H:302
12 kb
“Mucho pone quien pone espíritu
y voltea las entrañas pesadas de las criaturas.
Pero este tiempo que vivimos es del hombre y de la mujer
con los dos hemisferios, el emocional y el activo”.
(Gabriela Mistral, Escritos políticos)

 
Estimadas funcionarias:

Hoy se celebra en Chile y en el mundo el Día Internacional de la Mujer, fecha emblemática que nació como una manera de llamar la atención sobre las desigualdades y numerosas dificultades que han tenido las mujeres a lo largo de la historia para integrarse al mundo público y laboral.

La conmemoración de esta fecha nos permite distraernos unos momentos del trabajo cotidiano para reflexionar acerca de los avances y cambios culturales que ha experimentado el rol de la mujer durante los últimos siglos.

En estas últimas décadas las mujeres han logrado adelantos tangibles en muchos frentes. En nuestro país, en tanto, los avances han sido importantes: concesión del derecho a voto, incorporación de la mujer al trabajo y acceso progresivo a puestos de alta responsabilidad política. Pero aún quedan muchas mujeres discriminadas en todo el mundo, privadas de los derechos más fundamentales, agredidas o maltratadas, sometidas incluso por sus propias familias, lo que nos debe recordar que este día está todavía lleno de su contenido original y conlleva, aún, muchos desafíos y tareas por cumplir.

La mujer en el nuevo siglo se ha convertido en una parte vital de la sociedad, tanto por su fuerza de trabajo, como por la función formativa desarrollada, a través de la familia, con sus miembros.

En nuestro Servicio, desde Arica a Punta Arenas, trabajan 484 mujeres, quienes día a día enfrentan numerosos desafíos, en puertos, aeropuertos y avanzadas fronterizas, cumpliendo con una labor difícil, en condiciones climáticas duras, alejadas de sus familias y afectos.

Asimismo, entre ellas, se destaca el esfuerzo de funcionarias que en forma paralela a su trabajo en la Aduana, han realizado cursos y seguido estudios, con todos los costos físicos y familiares que esto conlleva.

Al reflexionar sobre los cambios ocurridos, hay algo que se destaca por encima de todo lo demás: hemos aprendido a valorar a la mujer como un importante agente de cambio, aportando una mirada distinta, una mayor flexibilidad, capacidad de diálogo y de trabajo en equipo, así como con una sensibilidad especial, calidez y cercanía.

La mirada femenina permite ver el mundo desde una óptica muy distinta a la de los hombres, no por esto es antagónica, sino enriquecedora, complementaria e inclusiva, ya que incorpora los afectos, la empatía, la intuición y la creatividad. De esta forma, la visión y el trabajo de nuestras funcionarias marcan la diferencia, enriqueciendo las relaciones, tanto con nuestros usuarios como al interior de la Aduana, aportando con una perspectiva más fresca, activa y dedicada, sin dejar de lado el profesionalismo y el compromiso con sus labores.

En este Día Internacional de la Mujer, quisiera saludar a cada una de ustedes, e invitarlas a replantearnos juntos el modelo de trabajo de la Aduana, creando un clima que valore la diversidad y el respeto entre funcionarios y funcionarias, para así sacar a la luz los soportes donde descansarán las nociones de igualdad y diferencia, y transparentar el servicio que deseamos construir: una Aduana más cercana y humanizada para el siglo XXI.

Un afectuoso saludo a todas,

Karl Dietert
Director Nacional